La producción de sudor va de la mano del ejercicio. Múltiples factores determinan la cantidad de sudor que se pierde al realizar cualquier ejercicio (calor, humedad e intensidad del trabajo, por ejemplo). El ejercicio ligero con sudoración mínima puede inducir una pérdida de sudor de 1 a 4 litros, mientras que los caballos de alto rendimiento en el pico de esfuerzo pueden tener pérdidas de entre 12 a 18 litros.
Debido a que se pierden grandes cantidades de electrolitos con el sudor, la suplementación con electrolitos se convierte en un factor clave en el manejo de la dieta de los caballos que entrenan a diario.
La suplementación con electrolitos no es específica de la temporada. Los electrolitos bien formulados deben usarse siempre que los caballos suden a diario o casi a diario, sin importar la temporada.
Los caballos con concentraciones insuficientes de electrolitos en su cuerpo se cansan antes y, por lo tanto, tienen menos resistencia.
Sin electrolitos, el cuerpo no es capaz de mantener la cantidad adecuada de líquido dentro y alrededor de las células, y juegan también un papel clave en la transmisión de los impulsos nerviosos y la contracción muscular.
Los signos de una deshidratación severa son marcha irregular, contracciones musculares descoordinadas, temblores y debilidad muscular.
Fuente: https://ker.com