Como ya adelantaba en el mes de Abril, esta es una sección de revisión de libros sobre caballos. Dado que el primer artículo hablaba del último libro de esta autora, ahora toca hablar del, quizá, más célebre de todos sus libros.
En el primer artículo comencé por analizar “Caballos en compañía” porque es un libro que habla de cómo es el caballo como ser vivo, cómo aprende, y cómo se comporta, principalmente en libertad pero también en comparación con cómo es y cómo se comporta en su estado doméstico bajo nuestros cuidados.
Considero que debe de leerse antes “Caballos en compañía” y luego “la lógica del caballo” porque el primero da una visión muy profunda que nos va a ayudar a entender los ejercicios, prácticas y lecciones magistrales de la lógica del caballo, aunque “La lógica” fuera escrito antes que “Caballos en Compañía”.
La lógica del caballo fue escrito en 2010 (7 años antes que “Caballos en Compañía”), y es quizá el libro más práctico sobre doma del caballo y etología. En él Lucy Rees recoge todo lo aprendido a lo largo de toda una vida domando caballos y su experiencia como científica. Es un libro imprescindible para actualizar y ampliar muchos de los conocimientos apuntados en su anterior libro La Mente del Caballo..
Son 333 páginas que nos permiten conocer al caballo: Su anatomía, su conformación, sus reacciones, sus movimientos, cómo piensan, y por tanto, cómo “domarlos” o más bien educarlos, son algunas de la respuestas que la etóloga Lucy Rees nos da en este libro.
Es el primer libro que casi todo amante de la doma natural siempre coge entre sus manos, y me incluyo en ese grupo. Es verdad que no fue el primero, en mi caso, pero sí uno de los más valiosos. Casi todo el mundo en este “mundillo” hemos oído hablar de él.
En este caso, el libro, tiene un carácter divulgativo sobre la etología del caballo a modo introductorio, para luego adentrarse de forma práctica en su doma (natural, racional, o bajo la etiqueta de respeto que queramos darle); sí que tiene cierto carácter de guía, y, por supuesto, posee numerosas fotografías propias de Lucy o sus ayudantes, dibujos y esquemas que ayudan a entender los ejercicios que describe.
Aunque, como en todo, hay ciertas cosas que son difíciles de aprender, incluso leyendo: por ejemplo a montar adecuadamente; pero ayuda mucho a entender el porqué de muchos errores en la doma tradicional y sus consecuencias, y las maravillas de una doma más respetuosa.
Es un libro sencillo, no es complejo ni en su lenguaje ni en los ejercicios o conocimientos que desarrolla, algunos de ellos incluso tratados de forma parecida por otros conocidos “horsemen”.
El libro consta de tres partes: una primera que habla en general sobre el caballo, una segunda donde nos habla de los potros, y una tercera sobre el bienestar del caballo.
Todas las partes son interesantes, aunque voy a profundizar un poco más en los capítulos de la primera parte. Dejo al lector, tras la lectura de este artículo si no ha leído el libro, el interés por descubrir más profundamente el contenido de la segunda y tercera parte.
PRIMERA PARTE; el caballo.
- El caballo en su entorno.
En este capítulo nos habla de la evolución del caballo, desde sus orígenes salvajes hasta el caballo doméstico en la actualidad, de cómo el entorno ha influido en que el caballo tenga las características físicas y sensoriales que tiene hoy en día que le permitieron sobrevivir.
En nuestros días, el caballo doméstico no tiene depredadores, pero en sus orígenes sí. Es un animal de presa que, en sus poblaciones ferales hoy en día aún tiene grandes depredadores como el puma.
Explica por qué el caballo es tan huidizo, su estrategia de vivir en manada, y su estrategia alimenticia que hace de él un herbívoro monogástrico (tan susceptible a cólicos cuando la alimentación que le damos no es la adecuada) que se alimenta principalmente de plantas (y no de grano, o pienso) de baja capacidad energética.
También desmiente el concepto de jerarquía de dominancia estricta en la especie del caballo (otra vez…)
Describe la vida social de los caballos en libertad para posteriormente poderla comparar con cómo viven nuestros caballos domésticos.
Esta introducción permite hacer un sumario de los puntos clave útiles en la doma, teniendo en consideración la naturaleza del caballo y el por qué de las cosas.
- La vida social de los caballos domésticos.
Una vez hecha la introducción que nos permite comprendar aquello de “de aquellos polvos, estos lodos”, entramos en el lodazal.
Y relata cómo el comportamiento del caballo doméstico se ha alejado de lo que es su comportamiento en libertad “gracias” a la mano humana.
Cómo aparece la jerarquía, las agresiones, las esterotipas fruto del manejo del humano: la falta de espacio, la alimentación inadecuada, el manejo agresivo, la mala gestión de los potros y los sementales; que crea animales estresados con comportamientos que tradicionalmente se creen “naturales” en el caballo y que para nada lo son.
Sigue rompiendo mitos como que agachar la cabeza signifique sumisión (“el caballo atacado o estresado no tiene señales de sumisión”)
Deja atrás el concepto de “dominar” el caballo, el “enseñarle quien manda” y ahonda en “cómo ganar la confianza del caballo” explicando algunos ejemplos para hacerlos (muy alejados por supuesto de las creencias populares).
Nos explica lo que de verdad quiere o busca el caballo de nosotros cuando está en ese proceso que llamamos “doma básica”.
Ya desde el principio empieza a romper muchos mitos de la equitación tradicional.
- Las percepciones del caballo
En este capítulo nos habla de los sentidos del caballo, su importancia y cómo funcionan: la vista, el olfato, el oído, el tacto; cómo se mueve el caballo y por qué en relación a sus sentidos y el sentido de la huída en un caballo. También nos habla del lenguaje corporal de los mismos y la importancia de saber interpretarlo y adaptarlo a nuestr forma de relacionarnos con el caballo, de educarlo, de domarlo.
Este capítulo es un compendio de lo que ve, siente y hace (y por qué lo hace) un caballo; y cómo se comunican entre ellos, claro.
Todo esto debemos tenerlo en cuenta a la hora de domarlo, incorporándolo a nuestra metodología de trabajo para comunicarnos en su mismo lenguaje y poder entender sus reacciones y ser conscientes de nuestros posibles errores.
En la doma tradicional, ¿realmente se es tan observador y se conoce tan bien estos temas como para tenerlos en cuenta?
En este tema podemos ver varios ejemplos prácticos de cómo poner estos conocimientos en práctica en la doma básica de un potro y qué es lo que se debe, y no se debe hacer.
Cuando leí el libro me llamó la atención que Lucy menciona varias veces a la raza de caballo árabe; me llama la atención porque como propietaria de uno es una raza que me tiene enamorada. En este capítulo menciona que los receptores visuales en los ojos de los caballos puede variar según la raza, y para un árabe un objeto visto por la esquina del ojo se ve menos nítido que para otras razas de sangre fría, pudiendo explicar esto el hábito de asustarse de los árabes en ciertos momentos.
Trata el concepto fundamental de la “distancia de huída”, tan importante para la “doma natural” en los múltiples ejercicios pie a tierra que buscan el movimiento del caballo.
- La comunicación
En este capítulo penetra más en cómo se comunican los caballos, ya que nosotros deberemos aprender a ver estas señales para entender su significado, y a imitarlas de cierto modo para comunicarnos con ellos.
Hay una serie de fotografías sobre las expresiones faciales de los caballos donde nos ilustra qué significan (y qué no).
¿Nos fijamos realmente en las expresiones faciales de nuestros caballos? ¿Somos capaces de interpretarlas?
Y ya entra en materia de cómo usar esta información para comunicarnos con ellos para adiestrarlos, tanto pie a tierra como montados.
- Cómo se mueve un caballo.
Un poco de biomecánica básica y anatomía, con muchos dibujos muy ilustrativos y por supuesto fotografías; y conforme avanza el capítulo empieza a dibujar y definir los tan trillados conceptos de reunión, según unos estándares clásicos versus a lo que puede verse en la naturaleza, o según las diferentes formas de montar. Qué es biomecánicamente, cómo se consigue, qué es la inversión y qué supone esto para el caballo, así como una correcta reunión.
- Cómo aprende y cómo le enseñamos.
Una lección magistral sobre tipos de aprendizaje del caballo (asociativo y no asociativo) y cómo y en qué circunstancias llevarlo a cabo, con ejemplos prácticos.
Cómo usar el concepto del “termómetro del miedo” y lo aprendido hasta ahora en el libro para identificar las señales y saber hasta dónde llegar y cuándo parar.
Los refuerzos y los castigos (positivos y negativos), y que es el refuerzo lo que le enseña de verdad al caballo qué hacer. Deja de manifiesto que según estudios científicos y su experiencia el caballo aprende de forma más sólida con refuerzos que con castigos.
Habla del condicionamiento clásico y el operante.
Es un capítulo muy extenso que pone fin a la primera parte del libro, y donde pone en práctica todos los capítulos anteriores.
SEGUNDA PARTE- La doma del potro
La segunda parte del libro trata sobre la doma del potro, enfocado una vez más tanto pie a tierra como montado. Aunque de hecho, como bien explica la autora, muchos de los ejemplos y casos pueden aplicarse también para reeducar caballos ya adultos que fueron “mal domados”; aunque bien es cierto que esto último siempre requiere más paciencia que domar a un potro.
TERCERA PARTE- bienestar
En la tercera parte del libro, en la que habla del bienestar del caballo, pone de manifiesto las muchas veces terribles condiciones en las que viven algunos caballos domésticos frente a cómo se esperaría o sería la natural forma de vivir que deberían tener según las necesidades de la raza descritas en la primera parte del libro, y sobre todo sus condiciones. Cómo muchas veces la forma en la que viven nuestros caballos conlleva muchos de los problemas a los que nos enfrentamos en la monta o en el manejo, o a sus principales problemas de salud.
En esta parte explica qué son las estereotipias y los vicios de cuadra, cómo se generan, por qué, y por qué se mantienen. Aunque como bien dice la autora,
el “Dr Verde” suele ser la solución a muchos de los problemas, aunque no siempre; pero ayudar siempre ayuda.
Hay un capítulo dedicado únicamente a los machos enteros, que son los grandes caballos domésticos incomprendidos; para finalmente hablar de los mal llamados “caballos problemáticos” (enteros o no), y que realmente en la mayoría de casos somos nosotros los que originamos estos problemas.
Lo dicho, si aún no lo has leído, espero que este artículo te haya despertado el gusanillo. Tanto si eres nuevo en el mundo del caballo como si cuentas con amplia experiencia, como es un libro ameno estoy segura que te aportará nuevas ideas, te ayudará con algunas dudas, y te hará darte cuenta de algunos errores.