Aquellos caballos que confían plenamente en las personas que los cuidan duermen tranquilos, ya que se sienten seguros y a salvo. ¿Cómo lo expresan? Pues relajándose, por eso, pueden producir flatulencias y roncar. En una finca de Canadá llamada Equinisity, un grupo de caballos disfruta del entorno y de los cuidados de los dueños, quienes ofrecen cursos de relajación y meditación con caballos. Son conocidos los espacios de retiros espirituales, pero no lo son tanto los que incluyen caballos.