El caballo Palomino es más conocido como Isabelino en España, por la reina Isabel II, quien fue una de las impulsoras de estos caballos en el país.
En Norteamérica, al caballo palomino no se le define sólo por la capa sino también como raza, ya que se reconoció formalmente la Palomino Horse Association, fundada en 1936. La denominación de Palomino posiblemente proviene del caballero Juan de Palomino, quien recibió de Hernán Cortés un caballo de esta raza. Aun así, también existe la versión de que deriva de una variedad de uva blanca española.
Tiene una capa dorada realmente característica, que puede ser más clara o más oscura, pero tiene siempre cola y crin de color blanco brillante. Cuenta con unos ojos de color avellana u oscuros y a veces tiene algunas manchas blancas en la cara, que se replican normalmente en los pies, sin llegar a rebasar la rodilla o el corvejón.