Los hábitos de sueño de los caballos son completamente diferentes a los de las personas. Por un lado, los caballos duermen por cortos periodos de tiempo espaciados a lo largo del día; en cambio nosotros dormimos largos periodos seguidos. Por otro lado, los caballos no son tan nocturnos como las personas.
Estos hábitos se deben, especialmente, al hecho de que se trata de animales de presa y deben estar permanentemente alerta por si se acerca algún depredador. En el caso de los caballos domésticos, debemos procurar mantener una cama bien hecha y seca para permitir un buen descanso del animal durante el día.
Imagen: Cursos Equinos
Para descansar mientras está erguido el caballo ha desarrollado un sistema anatómico denominado aparato recíproco de sostén. En la fotografía podemos ver como funciona este sistema. Mientras el caballo mantiene relajada la extremidad izquierda, la derecha soporta todo el peso de los cuartos posteriores.
Si una persona intenta hacer lo mismo, al poco tiempo siente un fuerte agotamiento en la extremidad que se mantiene en tensión. En el caso del caballo, el aparato recíproco de sostén permite mantener extendida la extremidad sin apenas hacer esfuerzo muscular. Ello se debe a una combinación de tendones y ligamentos que permiten mantener la extremidad erguida sin la intervención de los músculos. Cada cierto tiempo el caballo alterna la extremidad extendida y la que se encuentra en flexión.
En el siguiente video nos muestran como el caballo es capaz de bloquear el corvejón del pie posterior para poder descansar (equine stay apparatus).
https://www.youtube.com/watch?v=Hq5zYwEsqeg
Video de: IVALA® – 3D Veterinary Anatomy, Clinical Concepts, Interactive Courses & Education
