Los caballos han ido perdiendo una propiedad antiguamente imprescindible, el pelaje de camuflaje: el color pálido con rallas y marcas conocidas como el patrón «Dun». Un equipo internacional de científicos ha descubierto qué hay detrás de esta propiedad y porqué se ha perdido en la gran mayoría de caballos modernos.
A partir de pinturas rupestres de caballos y observando las especies más antiguas como los Przewalski, se han realizado unos estudios genéticos (efectos de la proteina TBX3) en los que se ha demostrado que los caballos con coloración «Dun» (color pardo con rayas en la espalda o en las patas, al estilo «cebra») son parientes de los caballos ancestrales
«Dun» es un gen que afecta a la dilución del color del pelaje. El término Dun es anglosajón, y significa «pardo«. Se utiliza internacionalmente para designar las capas que produce este gen.
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Esta coloración aportaba a los caballos la función de camuflaje, muy importante para un animal presa. La mayor parte de los caballos actuales carecen del patrón de pelaje «Dun», y tienen colores más intensos y homogéneos.
Hay otras especies animales relacionadas con el caballo que también tienen esta característica en el pelaje como son: el kiang, el onagro, el asno salvaje africano, y la quagga, una sub-especie de cebra de las llanuras, ahora extinta.
Desde que se supuso la existencia de este gen, se sostuvo que se trataba de un gen con dos alelos, uno dominante (D) que producía la dilución dun, y uno recesivo (d) que no expresaba ninguna modificación en la capa.
Sin embargo, este estudio genético realizado en 2016 descubrió que existían al menos tres alelos para este gen. Uno dominante (D) que produce el fenotipo citado, y dos alelos recesivos (d1 y d2) que no lo producen. El alelo dominante D es el más antiguo, estando presente en todos los demás équidos. El alelo d1 se estima que surgió hace unos 40.000 años como una mutación recesiva de este. Comparte con él similitudes como la presencia de marcas primitivas. Finalmente el alelo d2 apareció en caballos domésticos como una mutación de d1 y no produce marcas primitivas en la capa.
Más info: https://www.nature.com/articles/ng.3475