El vitíligo es un trastorno no contagioso caracterizado por la pérdida progresiva de la pigmentación de la piel. Por otro lado, la capa torda de los caballos se asocia con una alta incidencia de melanoma y despigmentación de la piel similar al vitíligo. En el caso de las personas, estudios científicos relacionan genéticamente el vitíligo y el melanoma; pero… ¿qué ocurre en el caso de los caballos?
Los caballos de Pura Raza Española (PRE) suelen caracterizarse por el color gris del pelaje, un rasgo que, como hemos visto, está asociado con la susceptibilidad al vitíligo y al melanoma. El estudio Genetic and environmental risk factors for vitiligo and melanoma in Pura Raza Español horses, de la Universidad de Sevilla y la Asociación Nacional de Criadores de Caballos de Pura Raza Española (ANCCE) (Enero de 2019), pretendía determinar dicha prevalencia, los factores de riesgo ambientales y los parámetros genéticos para el vitíligo y el melanoma en caballos PRE.
La investigación, llevada a cabo por 18 veterinarios, tuvo en cuenta más de 11.400 yeguas y sementales de 36 países. Además de las características físicas, se estudiaron factores de riesgo ambiental como la edad, el sexo, el color de la capa y el área geográfica a la que pertenecían los animales.
Los resultados muestran que la prevalencia de vitíligo en la nariz es alta (20,5%) y que se acentúa en los caballos tordos. En el caso de vitíligo alrededor de los ojos (2,8%) y melanoma (1,6%) fue menor, aunque también ligeramente mayor en caballos tordos. La endogamia resultó ser un factor de riesgo significativo en todos los casos, en particular para el vitíligo alrededor de los ojos en caballos tordos. También la edad es un factor de riesgo.
Si bien se trata de una primera aproximación a la cuestión, sería interesante investigar en futuros estudios el grado de malignidad del melanoma en caballos PRE para certificar hasta qué punto perjudica el bienestar de los animales. De todos modos, estos hallazgos pueden ayudar a reducir la prevalencia de estos trastornos a través de programas de reproducción.
Imagen de portada: Alexandra Beckstett – thehorse.com