Desde la domesticación del caballo, estos animales han sido utilizados para varios propósitos, desde el transporte hasta la agricultura o el deporte. El origen de la domesticación del caballo permanece desconocido hasta el momento, sin embargo, se sabe que el genoma del caballo ha sufrido grandes cambios en los últimos 2.300 años.
La domesticación de los caballos revolucionó la guerra y aceleró los viajes, el comercio y la expansión geográfica de los idiomas. Siguieron siendo primordiales para el transporte incluso después de la llegada de la locomoción a vapor y hasta el uso generalizado de vehículos motorizados. Revolucionaron la guerra, tirando de carros en la Edad de Bronce, proporcionando los cimientos para la batalla montada en la Edad de Hierro temprana, y facilitando la propagación de la caballería durante la Antigüedad.
Hoy en día, los caballos siguen siendo esenciales para la economía de los países en desarrollo y para las industrias del ocio y las carreras en los países desarrollados. En un estudio reciente se presentaron las series temporales de ADN más grandes para un organismo no humano hasta la fecha, incluidos datos a escala genómica de 149 animales antiguos y 129 genomas antiguos, 87 de los cuales son nuevos. Estos datos han permitido evaluar el legado moderno de las civilizaciones ecuestres del pasado.
La investigación muestra que existieron dos linajes de caballos extintos durante la domesticación temprana: uno en el extremo occidental (Iberia) y otro en el oriental (Siberia) de Eurasia. De todos modos, ninguno de ellos contribuyó significativamente a la diversidad de razas de caballos de la actualidad. A su vez, el estudio determina que la influencia de los linajes de caballos relacionados con los persas aumentó después de las conquistas islámicas en Europa y Asia.
El origen genético de los caballos domésticos modernos sigue siendo polémico, aunque independientemente de los orígenes de la domesticación, se sabe que el genoma del caballo ha ido cambiando significativamente en los últimos 30.000 años. Sin embargo, en qué momento y en qué contexto se produjeron tales cambios sigue siendo en gran parte desconocido.
Para aclarar los orígenes de los caballos domésticos y revelar su posterior transformación por civilizaciones ecuestres pasadas, generamos datos de ADN de 278 subfósiles equinos con edades que abarcan los últimos 6.000 años.
Los resultados también muestran que los alelos múltiples incluido el «gen de la velocidad», solo han aumentado en el último milenio. De hecho, las prácticas modernas de reproducción han sido las responsables de la significativa caída en la diversidad genética, así que, la gestión humana ha impactado dramáticamente en dicha diversidad.
El uso de herramientas moleculares ofrece la posibilidad de analizar la ascendencia de los caballos. El objetivo de este estudio fue aclarar los orígenes de los caballos domésticos y revelar su transformación por las civilizaciones ecuestres del pasado. Estos resultados dan una visión interesante de la ascendencia del caballo moderno, pero permanecen grandes lagunas en el conocimiento sobre el origen del caballo doméstico moderno que requerirá de nuevos estudios para profundizar en este tema.