Sentir, aprender a escuchar, conectar, empatizar, manejar la fuerza tremenda de la compasión, y llegar a una relación en la que el caballo revela su magia en simbiosis con su jinete…¡no sé si será una metáfora poética, pura fantasía u otro antropomorfismo narcisistamente humano.
Sin embargo, en el mito ancestral encuentro respuesta, fe y paz. El caballo legendario maestro y guía le ordena a su jinete: Escúchame que yo ya, lo sé todo. Tú no tienes más que el coraje.
¡Escúchame y te guiaré!
Libros y documentales, científicos y poetas, historiadores y pintores en varios lugares del globo retoman historias, datos históricos y mitos de civilizaciones entreteniendo relaciones inspirantes, fascinantes, místicas y a veces paradójicas con el caballo.
A veces son historias llenas de espiritualidad, ambigüedad tal vez, y otras, de fantasía y cariño o de terror y final macabro.
El caballo, protagonista silenciosamente locuaz, siempre está allí. Alcanzando el Olimpo sin Belerofonte, secuestrando a niños hacia los oscuros océanos nórdicos, acompañando profetas, convirtiéndose en metáforas de pureza y sacralidad y conquistando cargado con la fe de su jinete.
El caballo, animal constantemente presente en imagen o físicamente para ser la voz del infinito, del éxito o un recuerdo de fracaso y una lección de humildad.
Los caballos de sol todavía no han alcanzado la vuelta de Helios al cielo, pero están galopando toda la noche en mi cabeza preguntando:
¡Humano,¿ y si te haces aprendiz y escuchas el relinchar de la poesía profana que dictan nuestros cascos? Poco sabes, pero en el camino del dulce preguntar te guiaremos:
1 ¡Dice el primer caballo!
¿Y si desarrollamos una relación sana? (Nociones de etología)
¿Qué significa una relación sana?
El compromiso para empezar: “Compromiso: «En el corto plazo se refiere a la decisión de que uno ama a alguien concreto y, a largo plazo, a que uno se compromete a mantener ese amor» (Ibíd., pp. 46-48). Compromiso es un proyecto de vida compartido, un estilo de vivir con el que ambos miembros de la pareja se identifican y con el que ambos, sin obligaciones externas, deciden comprometerse para llevarlo a cabo.”
Gabriel J.Martín
Comprometerse a desarrollar una relación sana con su caballo implica considerar que un caballo es un compañero de un plazo de vida que intentemos alargar lo que se puede.
Este compromiso voluntario por parte del jinete debe tener en cuenta el estilo de vida y la naturaleza del caballo, su identidad y características como animal gregario y presa .
Por una parte, la etología, como estudio del comportamiento del caballo en su entorno natural, por otra parte la etología aplicada o clínica resolviendo problemas de conducta que aparecen en animales fuera de su condición natural, ambas nos pueden ayudar a entender mejor la mente del caballo y su funcionamiento fuera de la intervención humana para mejorar su calidad de vida y relación con su jinete.
Un ejemplo muy concreto:Las estereotipias que se interpretan como intentos de agresividad (mordiscos por ejemplo) mientras que no son más que intentos de expresar un malestar, un dolor, es una forma indirecta de pedir ayuda, un intento de comunicación:
Los caballos allí se enfrentan con la Desconexión del humano, la rigidez, falta de presencia en el momento presente y conocimiento de la mente equina.
¡El problema aquí es la falta de comunicación!
Cuantos jinetes se rinden y abandonan a un caballo simplemente porque este ultimo no entiende un mando con la fuerza, o esta confuso, o incluso deprimido sufriendo de un estado anímico negativo. No pretendo que lo hagan con mala intención, pero muchas veces por desconocimiento y falta de paciencia.
Hay, creo, dos categorías de jinetes; los que co habilidad, utiliza el caballo como instrumento y aquellos que lo aman y dejan que se exprese con brillantez.
Los primeros no son menos expertos que los segundos, pero estos últimos corren el riesgo de ser siempre los poetas malditos de este arte.
Nuno Oliveira
2 ¡Quiero vivir feliz! añade otro caballo:
Nociones de bienestar: El animal feliz
Un punto muy positivo que subrayar es el desarrollo de la noción de bienestar animal generalmente y equino específicamente.
La noción de bienestar ya no se basa en la ausencia de experiencias causando emociones negativas. Hoy en día se intenta centrar en las positivas.
Internacionalmente se están desarrollando métodos de medición de esas emociones y escalas que nos indican con métodos cada vez más desarrollados el estado emocional del caballo.
De manera práctica, ¿ cómo se puede fomentar la felicidad de su caballo?
Algunas pistas:
- Adaptar la alimentación a la edad, actividad física, peso corporal, raza y posibles patologías e intentar repartir la comida lo máximo posible como lo sería en el estado natural.
- Alternar entre la cuadra y las salidas al prado y si lo es posible optar por métodos como el” Paddock Paradise” que permitan al caballo mayor movimiento en terrenos variados y un nivel de vida social apropiado.
- Es importante añadir ejercicios de “core training” para fortalecer el dorso del caballo.
- exponer al caballo al máximo de estímulos posible desde una temprana edad, para evitar problemas de adaptación más tarde.
- Desarrollar un plan de actividades variando los ejercicios e incluso las disciplinas, para así evitar el aburrimiento y la falta de estimulación cognitiva.
- Para su bienestar emocional, permitir un mínimo de contacto con miembros de su especie.
3 ¡Interviene otro caballo para reclamar su derecho!:
Un entrenamiento consciente
¿Cuál es la diferencia entre los cazadores posando en fotos con sus presas y los que entrenan caballos sin respetar su biomecánica, su edad, condición física y nivel de entrenamiento?
- Es fundamental tener una lógica en el entrenamiento y aprovechar los logros científicos para respetar la biomecánica del caballo, trabajar su condición física como cualquier otro atleta, fortaleciendo su dorso y cuidando su boca.
- Muchas veces surge el problema de la equitación como negocio porque, en fin, lo es, y cada vez más hoy en día pero eso no nos impide repasar nuestras técnicas de enseñanza y mejorarlas en el sentido de desarrollar una relación más sana entre el jinete y su caballo.
Un ejemplo concreto es el caso del principiante con las riendas en mano desde la primera clase buscando entender su efecto.
¿Antes de darle las riendas y explicar su efecto no vendría bien enseñarle al iniciante a sentir?
«il ne faut pas commencer l’équitation en apprenant les effets des rênes, mais en apprenant à ressentir» / «uno no debe empezar a montar aprendiendo los efectos de las riendas, sino aprendiendo a sentir»
Un siécle á cheval, Paolo Angioni 1985
- Algunas soluciones prácticas a la hora de desarrollar un plan de entrenamiento positivo con el fin mejorar la relación antes, durante y después de la sesión :
- El aseo debe ser un momento agradable para el caballo. (imitar gestos afiliativos entre equinos).
- Las sesiones de entrenamiento deben primordialmente incluir calentamiento y vuelta a la calma. Se puede aquí aprovechar incluyendo ejercicios de respiración para el jinete y sobre todo no tener miedo a soltar las riendas y relajarse antes, durante y después de la sesión.
- ¡No pasa nada si tomamos unos minutos para cerrar los ojos, volver a la respiración y escuchar las pisadas de nuestro caballo antes de volver al objetivo de la sesión, a saltar un fondo o una banqueta o ejecutar un passage, etc. (el caballo detecta la variación de ritmo cardíaco a mas de 20 metros).
- En mi humilde experiencia como entrenador, había observado que incluir música, frecuencias sonoras … ayuda a muchos jinetes a calmarse y gestionar mejor la ansiedad montando, superar el miedo, o recordar que debe seguir respirando al saltar… lo que permite al caballo intuir la actitud de su jinete.
- Tener en cuenta el ambiente en el que entrenamos, por ejemplo ser consciente del impacto de los colores: vestido, herramienta, pista barras (visión equina / efecto de los colores en las personas)…
- Programar sesiones sin montar, desarrollar el vínculo con actividades divertidas también para el caballo.
- Variar los ejercicios, incluir salidas al campo y día de descanso. ( dar cuerda en un campo con hierba puede ser buen motivo para estirar el cuello y fortalecer el dorso)
- Estar pendiente de la condición del caballo y adaptar la sesión en su función incluso bajando expectativas, duración o cambiando ejercicio.
- Modo de vida que permita mantener la actividad cognitiva viva tras un enriquecimiento ambiental.
- Preparación física y mental del jinete.
- Desarrollar el ámbito de psicología deportiva.
- Inyectar conocimientos etológicos en la formación de los técnicos etc…
4 ¡Relincha el ultimo caballo!
Ahora te explico el Principio de interdependencia que rige el mundo:
(Vivir en Simbiosis)
El confinamiento y sus impactos deberían generar empatía, simpatía y compasión en los amigos del caballo, hacia lo que sienten esos últimos que no pueden socializar, ni rascarse y menos revolcarse y llegan hasta perder la autopercepción. Por desgracia varios caballos acaban ausentes, drogados con su propio cortisol, desconectados totalmente y varias veces los humanos lo interpretan como sumisión en lugar de ver la señal de alerta.
…” Dios había creado al hombre a su imagen y semejanza, otorgándole un papel superior y cualidades especiales. De acuerdo. Pero, en contrapartida, Dios también le había encargado numerosos deberes, bastante femeninos, como cuidar de, velar por o mantener la armonía. Sin embargo, al conquistar nuevos territorios, el hombre enseguida se sintió vulnerable y, para envalentonarse, sintió la necesidad de afirmar su poder. Entonces, interpretando los textos sagrados a la ligera, se arrogó el derecho de vida y muerte sobre la creación, con las devastadoras consecuencias que ya conocemos.
Hoy en día, la evolución natural del ser humano impone un cambio radical de mirada.”
( Kankyo Tannier, page 201, La magia del silencio)
El ego del animal humano y su dogma de supremacía apoyada por las religiones como lo explica muy bien Kankyo Tannier, le hacen olvidar que practicando equitación lo primero que buscamos es estar en contacto con esos magníficos animales antes de convertirles en maquinas destrozadas para satisfacer el capricho del humano.
Somos responsables, jinetes, entrenadores, amantes y amigos del caballo y de los animales, de elaborar y defender la obligación de otorgar igual importancia a todos los habitantes del planeta y conservar su derecho en una vida que respeta su bienestar, características y modo funcional.