Es posible que asocies el «agility» con una actividad canina en la que el perro tienen que abordar una gran variedad de obstáculos, sin embargo, ¿sabías que también hay una versión de agility para caballos?
Se trata de un deporte internacional centrado en el desarroyo de una comunicación clara y basada en el refuerzo positiva. Te ayuda a construir una relación más sólida con tu caballo, y como se practica pie a tierra, también es adecuada para caballos que no pueden ser montados o para caballos mayores para mantenerlos activos y motivados.
Esta disciplina se gestiona a través de «The Horse Agility Club», cuya responsable es Vanessa Bee. Desarrolló el agility para caballos como una extensión del trabajo preliminar, encontrándolo particularmente útil para trabajar con caballos jóvenes. Ella creó el club en 2009, y ahora hay eventos y divertidas demostraciones en todo el Reino Unido.
«Uno de los motivos por los que encuentro a este deporte tan bello es por el hecho de ser tan inclusivo», dice Vanessa. “Desde el principio, quería crear un deporte ecuestre que no fuera elitista, que se pudiera practicar con cualquier caballo y con obstáculos sencillos. Queremos que todo el mundo tenga la oportunidad de competir, sean cuales sean sus capacidades físicas o mentales. Ahora incluso tenemos concursos on line para personas que no tienen su propio transporte para llegar a los eventos. De hecho, todo lo que se necesita para el agility es un collar para el cuello y una cuerda larga. Las bridas no están permitidas: se trata de comunicación, no de control y siempre estamos trabajando para quitar todo el equipo y que el caballo responda a las señales corporales y verbales. Tampoco permitimos ningún tipo de látigo o palo «.
La entrenadora de equitación positiva Judith Edel comenzó a entrenar con Pip, un pony que adoptó en una protectora, y al ver los buenos resultados que estaban obteniendo decidió dar un paso más allá y competir en agility equino con él.
«El agility equino está abierto a todo tipo de equino e incluso a burros, de cualquier edad y tamaño», dice Judith. “Pip es un pequeño pony de la Montaña Galesa que desconfiaba de las personas y era demasiado astuto para ser un pony seguro para los niños. Pero este deporte nos ha dado la motivación para afinar nuestra comunicación, especialmente cuando trabajamos en libertad, y cada mes, vamos añadiendo nuevos desafíos, siempre hay algo nuevo por trabajar.
El objetivo es guiar a tu caballo con suavidad y amabilidad, con la menor presión posible. Entreno a todos mis caballos y burros con refuerzo positivo, que está completamente libre de presión. Desgloso los comportamientos que quiero en pequeños pasos y recompenso a los caballos por cada paso que dan hacia el objetivo final. De esa manera, disfrutan el entrenamiento tanto como yo, y siempre están felices de venir a jugar ”.
Puedes probar algunos obstáculos con tu caballo, no obstante, necesitarás algunos elementos, como pueden ser cuerdas, aros, arena, barras o conos.
«Un obstáculo fácil de pasar para un principiante es la curva S», dice Vanessa. “Este es un laberinto hecho de postes, como un pasillo en forma de «S» en el que el caballo tiene que pasarlo caminando, sin salirse ni tocar los postes. Esto realmente enseña a las personas a reducir la velocidad y dirigir cada pie del caballo individualmente. Otros obstáculos incluyen atravesar una cortina o caminar sobre una lona. A medida que avanzas, los obstáculos se vuelven más difíciles. Uno de los más difíciles es el «pole back up». En él el caballo debe retroceder sobre un poste sin tocarlo. Suena fácil, pero no lo es: tienes que aprender a establecer un ritmo y alentar al caballo a levantar los pies sobre el poste. El obstáculo donde el caballo entra en un «hula hoop» puede ser igualmente frustrante. La gente siempre piensa que los grandes obstáculos como los balancines o los saltos de aro son difíciles, pero estos son fáciles una vez que te has ganado la confianza de de tu caballo ”
Fuente: Horse and Hound