El trabajo en libertad con caballos está muy asociado al espectáculo, siendo una de sus vertientes más populares, pero hay otras aplicaciones que pueden ayudar a los caballos desde la base de su educación hasta ejercicios relacionados directamente con la equitación.
Hay dos elementos fundamentales a tener en cuenta para realizar el trabajo en libertad, el primero es la edad del caballo y el segundo las instalaciones. Para poder realizar un trabajo en libertad seguro y eficiente debemos contar con un picadero redondo de entre 16-18 metros de diámetro, con un suelo estable y un cercado en barras horizontales resistentes (metal o madera) y de una altura mínima de 1,75 metros.
Sean cuales sean los objetivos o la disciplina que vayamos a practicar, debemos empezar por los cimientos de la educación, en los que va a sustentarse la progresión durante la vida del caballo, siguiendo un plan de trabajo según su edad*.
Entre 8 y 18 meses, prepararemos al potro para la manipulación con la cabezada y construir el trabajo en libertad gracias al trabajo con el ramal. El programa a esta edad son ejercicios básicos que nos permitan comunicar con el potro a corta distancia, tanto empezar a crear una relación de confianza y al mismo tiempo instalar los aprendizajes básicos que nos permita manipularlo y que se sienta acompañado en todo momento. Las primeras sesiones, las realizaremos en un espacio reducido (box grande o establo) y le enseñaremos 5 ejercicios esenciales:
- flexión lateral del cuello
- desplazamiento lateral de los posteriores
- vuelta exterior
- parada
- dejarse tocar por todo el cuerpo
Estos son los ejercicios indispensables para empezar a enseñarle al potro que parte de su cuerpo debe mover y en qué dirección, alternando la ayuda del ramal con las primeras demandas en libertad, para pasar a la etapa siguiente.
Desde los 18 meses hasta los 2 años y medio podemos empezar a trabajar en la pista redonda, combinando todavía la comunicación, con la cuerda de 4 metros, variando las distancias y alternando con la comunicación en libertad. Ahora añadiremos algunos ejercicios a los 5 iniciales:
- parada de emergencia
- vuelta interior
- guiarle con la cuerda invisible
- venir hacia nosotros
- paso atrás
- transiciones ascendentes y descendentes simples
- cambios de dirección interior y exterior
A partir de los 2 años y medio hasta los 4, empezamos a introducir ejercicios más complejos:
- pivotar sobre los anteriores
- pivotar sobre los posteriores
- desplazamiento lateral
- alejarse y venir al paso y al trote
- cambios de dirección interior y exterior al galope
- guiarle con la cuerda invisible al trote
Esta es una muestra de los ejercicios básicos indispensables para establecer una comunicación con el caballo en libertad y crear una conexión que nos permita tanto progresar en su educación y adiestramiento, como para la reeducación de caballos difíciles o resolver problemas de equitación como los cambios de pie.
*Tendremos en cuenta siempre hacer sesiones cortas y variadas.
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