Podemos usar cualquiera de estas palabras para describir a un caballo que enrosca su cuello hasta el punto que su belfo inferior se acerca exageradamente al pecho, su nuca queda baja y su cara aparece muy por detrás de la vertical.
Lo contrario a la hiperflexión (caballo encapotado), es el caballo invertido (caballo despapando), postura también a evitar. El caballo invertido tiene la nuca bloqueada, el cuello invertido y la cara casi en la horizontal.
El maestro clásico François Robichon de la Guérinière dice que hay que «perfeccionar la naturaleza a través del arte», teniendo en cuenta la ligereza, la elegancia y la descontracción muscular.
Consecuencias de la Hiperflexión
El ligamento nucal y los ligamentos superiores se estiran demasiado, el cuello pierde elasticidad. Todo en su cabeza sufre, las glándulas parótidas se comprimen. Cuando el caballo tiene esta posición no puede ver bien, avanza a ciegas. En su oído interno hay sensores que registran la aceleración en sentido vertical, horizontal y hacia los lados, esa información la procesa el cerebro, si no dejamos que coloque su cabeza a su gusto le provocamos problemas de equilibrio.
También en esta posición se acorta y se tensa el músculo braquiocefálico, que es el músculo que une la cabeza con el brazo, por eso se bloquea el movimiento de las espaldas. Esta posición de hiperflexión es incompatible con la flexión lateral del cuello impidiendo que cabeza y cuello actúen de balancín como contrapeso, bloqueando el balanceo de la columna vertebral necesario para el movimiento.
Al no poder estirar su cuello en línea horizontal los músculos dorsales largos que unen la cadera con las vértebras de la base del cuello hacen que estas se contraigan.
Con la hiperflexión, como bien dice el maestro José Manuel Sales Pons “El cura”, la nuca hace que el cuello se rompa por la articulación de la tercera vértebra, perderá el equilibrio y dejaran de trabajar correctamente los músculos del cuello. El ligamento nucal sujeta la cabeza a la apófisis de las vértebras por debajo de la cruz, este ligamento nucal tiene la función de soportar el peso de la cabeza para que el caballo pueda dormir de pie. Cuando dobla el cuello en extremo se crea una exagerada presión en la nuca y en la zona lumbar, el caballo no puede redondear su dorso ni meter sus pies, se dice que el caballo esta encapotado y carece de impulsión.
La maestra etóloga Lucy Rees respecto a la hiperflexión nos informa que si observamos caballos en libertad nunca adoptan estas posturas exageradas. Con la hiperflexión le obligamos a mirar al suelo caminando sin confianza, no respira bien teniendo la nuca tan doblada, si además tenemos la muserola muy apretada no mueve la mandíbula. El caballo se resiste a flexionar pero el jinete pone tanta presión en las riendas que el dolor de la boca es mayor que el de la articulación, el bocado está en su máximo ángulo y la cadenilla apretando. El caballo se opone a esta presión poniendo rígida su columna vertebral. Se crea mucha saliva en su boca y en esa posición no la puede tragar por eso vemos mucha espuma caer de su boca.
Si continuamos con la hiperflexiòn estiramos el ligamento que al ser elástico nunca se recupera. Palpando detrás de la nuca notamos como dos cables duros. La zona lumbar esta rígida y no puede redondear su dorso. Evidentemente con hiperflexión no puede haber impulsión, el jinete piensa que el caballo no anda por pereza y cree que se está resistiendo, por ignorancia mete sus pies clavando sus espuelas. Desastre total.
Gerd Heuschman, autor del libro “El dedo en la llaga”, nos habla de la hiperflexion. Y nos dice que el caballo joven tiene que sostener nuestro peso por el ligamento supra-espinoso, la continuación del ligamento nucal que une la apófisis de las vertebras. Necesita estirar y bajar el cuello, sin encoger la cabeza. Trabajo para fortalecer los grandes músculos del dorso, asistidos por el remetimiento de los pies. Si levantamos la cabeza demasiado pronto, el dorso tiene que contraerse para sostenernos y el caballo pierde la capacidad de meter los pies. Los pasos laterales, con flexión, ayudan al desbloqueo de los músculos del longissimus dorsi, ayudando así al caballo a desarrollar más cadencia en sus aires. Totalmente en contra de la hiperflexión, dice que la nuca y la articulación temporo-mandibular están sujetas a un estrés terrible, esta articulación afecta al oído interno y el equilibrio se ve perjudicado. El caballo es incapaz de meter sus pies sin sentir dolor en las lumbares, entonces los ligamentos suspensorios, ambos adelante y atrás, también sufren.
Método de entrenamiento
Método nefasto con consecuencias fatales para el movimiento y el equilibrio del caballo, se basa en la flexión exagerada del cuello del caballo. Teniendo las espaldas sobrecargadas precipitan el paso de los anteriores, al estar el cuello encogido impide que se alarguen los músculos dorsales, bloqueándose el movimiento de la columna, el dorso no funciona y los posteriores no pueden remeterse.
El uso del rollkur lo puso de moda una amazona olímpica y es fuertemente criticado por jinetes clásicos de reconocido prestigio como Philipe Karl y Reiner Klimke.
Lucy Rees, dice que es un método que hace sufrir mucho al caballo y los que lo usan solo lo hacen para ganar. Esta posición forzada fortalece la musculatura que ayuda al caballo a lanzar sus manos hacia delante de forma exagerada. Con el uso de riendas alemanas y la práctica de la hiperflexión aparecen bultos en los músculos contraídos justo detrás de la montura.
Un caballo hiperflexionado puede ir detrás de la mano. Si un caballo va detrás de la mano no se apoya en el bocado, lo evita por dolor, se encoge para evitar el contacto de las riendas. Si va detrás de la mano puede ir detrás de la pierna y se resiste.
Entrenamiento correcto
Lo más natural es un cuello largo y estirado, el centro de gravedad se desplaza hacia adelante, así se consiguen pasos amplios y naturales, estableciendo contacto con las riendas. Esta posición de estiramiento, alarga y redondea la línea superior del caballo, se estiran los músculos dorsales largos y el dorso se eleva, arqueándose le será más fácil llevar peso encima. Así también el músculo braquiocefálico se estira pudiéndose desplazar las espaldas hacia delante. También la posición de alargamiento de la línea superior se usa para corregir, estirar y relajar las líneas superiores, nos permite corregir cuellos invertidos y mejorar la amplitud de los aires de muchos caballos.
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