La Federación Ecuestre Francesa (FFE) prohíbe el recorte de los bigotes del caballo por razones de bienestar.
Con esta medida se une a Alemania y Suiza, para llevar a efecto una regla que descalificará a cualquier caballo de la competición al que se le hayan cortado los bigotes.
En su web afirman que las «vibrisas» (término correcto para llamar a los bigotes, los largos pelos táctiles que rodean el ojo, la nariz y la boca del caballo) son órganos sensoriales. Y al igual que los bigotes de los gatos, permiten que el caballo recopile información sobre el medio ambiente. Alrededor de los ojos sirven como protección y alrededor del punto ciego de la nariz, se hacen cargo de cubrir sus punto ciego (allí donde los ojos no ven.
Sin vibrisas 
Con vibrisas
La FFE acaba de incorporar una regla sobre este tema en su Reglamento General de la competición y es que, desde principios de 2019, competir con un caballo que ha sido privado de sus vibrisas ya no está permitido.
Esta nueva normativa surge del reconocimiento oficial que los caballos no perciben su entorno de la misma manera que los humanos y es necesario que aprendamos más sobre la etología y el comportamiento de los caballos, que promovieron como la clave para una mejor gestión y capacitación.
«El papel de la FFE es comunicar las buenas prácticas», dice Déborah Bardou, etóloga y gerente del departamento de bienestar animal de la FFE. «Es importante que los jinetes se comporten de manera adecuada con el caballo. Son los defensores del bienestar animal y deben respaldar la imagen de los deportes ecuestres».
La especialista en comportamiento equino Justine Harrison espera que otros países sigan reglas similares. «Los bigotes ayudan a un caballo a navegar por su mundo. Son órganos sensoriales multifuncionales y súper sensibles con nervios densos en su raíz que envían mensajes sensoriales al cerebro del caballo.
Estos bigotes son tan sensibles a la vibración y los cambios en la corriente de aire que puede informar al caballo de manera instantánea sobre su entorno, por ejemplo, ayudándolo a evitar lesiones detectando objetos cercanos, diferenciando entre diferentes texturas, juzgando la dirección del viento e identificando los alimentos. El caballo tiene un punto ciego debajo de su hocico, por lo que sus bigotes son una ayuda vital.
«Desde el punto de vista de los caballos, eliminar estos bigotes reduce su conciencia espacial y lo deja parcialmente discapacitado. Muchos países, incluidos el Reino Unido, Australia o España están muy atrasados en muchos aspectos del bienestar de los caballos y es hora de que nos pongamos al día junto a Francia, Suiza y Alemania, que ya prohíben el recorte de bigotes.
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Fuente: horsesandpeople.com
