Un informe danés recomienda acabar con la visión del caballo como atleta. Decir que, en cambio, deberíamos reconocer que la participación de los caballos en las competiciones se trata solo de los intereses y ambiciones de los humanos.
El informe requiere que se elabore una legislación específica si las recomendaciones del Consejo no “conducen a una acción inmediata por parte de la industria”.